Jack Andraka, es un joven de 16 años, para mucha gente la noticia de su descubrimiento ha pasado inadvertido, los medios no le han dado mucha relevancia. Este chaval usando la información  que hay en Google y Wikipedia ha inventado un dispositivo que es tan simple como un trozo de papel con un reactivo que detecta el cáncer en tan solo cinco minutos. Su precio ¡menos de 3 céntimos de €! Ahora, aquí se plantea un gran dilema para la humanidad.

La industria farmacéutica pondrá a sus lobbies y toda su maquinaria a funcionar para que esta patente no salga adelante ¿Por qué? Los motivos son estos:

El papelito del joven Andrakas es 26.000 veces mas barato, 168 veces mas rápido, 400 veces mas sensible, detecta los cánceres antes de que aparezcan, además no es invasivo ¿Con estas cifras, la industria farmacéutica va a consentir que se patente y su comercialización? ¿Van a permitir que sirva a la humanidad?

A la industria farmacéutica le importa un pimiento la salud pública, no permite comercialización de ningún compuesto que erradique o mejore enfermedades crónicas, como la diabetes, colesterol, cáncer, VIH, etc… Este sector tiene unos cliente, necesita clientes enganchados de por vida a sus fármacos, para mantener sus abultados beneficios y sus mastodónticas corporaciones.

Alvaro Villa Rey