SU MAJESTAD LA REINA. AÑO 2013. (Del Libro “ESPAÑA de haber dos… sería para emigrar y no volver”)
Publicado por Carmen Amigo, Posteado enOpinión
¿Después de Doña Sofía qué…?
Esta es la pregunta que cierto segmento de la población viene haciéndose.
Lo que no hay lugar a duda es que donde actúa con su presencia la gente del lugar la aprecia (la sensibilidad de atracción es tal que hubo quien se ofreció a hacerle una tortilla de patata lo que la llevó a sonreír ampliamente).
¡Madrid….! Madrid…
La tierra del Chotís.
Hace tiempo que ya no es un paradigma de lo consciente. Cuando el Ayuntamiento permite exposiciones que ofenden a amplia parte de la población católica.
El arrastre de la herencia del anterior Gobierno de la Nación con sus permisividades e instalaciones en plazas públicas de una juventud alimentada por los propios; solo hizo enrarecer España. España que en actual; tuvo que haber erradicado estos comportamientos.
España de ir bien. Ha pasado a ser la desheredada de Europa.
Madrid. Su Auditorio Nacional.
Lugar escogido de pitada contra la Reina.
Siempre hubo gallinero. En esta ocasión bien aprovechado por quienes mucho hacen de mala política y siniestros en Música.
Zarzuela culpa como efecto de los abucheos a la Familia Real; la tan manida crisis.
El paro. La desigualdad. El encarecimiento de la vida desde que el euro y el partido socialista en su anterior mandato se instalase. Dándole continuidad con la subida de impuestos el partido popular. Lo ambiguo. La permisividad. El delito. La falta de propósito para que ciertas instituciones pierdan el innombrable mundo de sus instalados en colchones millonarios. El tráfico de influencias. Las apropiaciones indebidas. La Justicia; que se debate para sacar a delante los despojos en que están convirtiendo el Reino de España. La traición (intento de desmembramiento del territorio Nacional). La corrupción. La ignorancia y poca destreza en asuntos que son del interés común de los españoles.
A cada uno su parte de responsabilidad. Jefe de Estado y Presidente de Gobierno a quien corresponde mandato.
Carmen Amigó y Pérez-Mongay
