Sobre nuestra dependencia total del Estado
Publicado por Gerardo Hdez Zorroza, Posteado enOpinión
Si no nos damos cuenta de que el desarrollo tecnológico al servicio del capital, en el que trabajamos el 90% de la población mundial como asalariados, es la causa de nuestros problemas como individuos y como sociedad es que estamos ciertamente aparvados. O que no queremos ver, claro, y preferimos seguir, inconscientemente, esta loca carrera hacia nuestra progresiva autodestrucción mental primero y probablemente física después.
Existe miedo a mirar la realidad de frente, pero es la única forma que tenemos de poder recuperarnos de esta caraja e ir poniendo las cosas en su sitio. De donde no se debieron mover algunas (sistemas antiguos de colaboración y ayuda mutua) y que el crecimiento del Estado “protector” fue destruyendo, alimentando así nuestra dependencia de él y nuestra pasividad. Ahora, podemos comprobar, la única fórmula que nos ofrece este Estado, además de seguir compitiendo como locos, es trabajar más horas y cobrar menos. Menos vacaciones, menos todo. Dentro de poco, trabajaremos como chinos para poder sobrevivir dentro de esta estructura. Se nos ha negado además el análisis, la posibilidad de decidir cualquier cambio, que en todos los órdenes además, nos viene dado desde arriba. Estamos perdiendo la comunicación horizontal, hombre a hombre, no solo en la relación de calle, sino, yo lo compruebo cada día, en el trabajo también. Se nos satura y, cuando demandamos información, se nos remite al ordenador, a encontrarla en no se dónde que aparece colgada. Toneladas de información además, que nos las vemos y deseamos para poder ordenar y seleccionar y que aportan en general bien poco. En fin, todas estas cosas hay que discutirlas entre nosotros, habilitar foros para ello (les propongo ver vídeos o leer la obra de Félix Rodrigo Mora). Pero no nos equivoquemos, hemos de cambiar en muchos aspectos de forma radical. Las reformas que ofrecen algunos y que siguen apoyando a este Estado (desde la Izquierda, Derecha, o el Centro) , obedecen a los mismos intereses creados de siempre. Aquellos que pusieron a este Estado (¿cuantas veces comentado, no?) a su servicio. Aquellos que fueron, en su avaricia, el origen del problema.
