Profanación en Pamplona.
Publicado por rafagutierrez, Posteado enOpinión
El Ayuntamiento de Pamplona ha prestado la sala cultural de la plaza Serapio Esparza, para una exposición del “artista” blasfemo y profanador, Abel Azcona; la exposición se denominada “Desenterrados”.
En la exposición se dan a conocer diversos proyectos del autor y entre ellos uno denominado: “Amén”. En “Amen”, incluye: una foto de él mismo desnudo; y la palabra pederastia, realizada con las 248 Formas Consagradas que robaba en diversas iglesias de Madrid y Navarra.
Conocido el hecho, se ha desatado una gran movilización social, encabezada entre otros por Hazte Oír, en la que piden al Alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, de Bildu, que retire esta exposición por ser: “El mayor ataque que los católicos, mayoritarios aquí, pueden padecer” y no se entiende que este patrocinado por el Ayuntamiento de Pamplona.
Este hecho será denunciado ante la Fiscalía General del Estado, instando a los fiscales a actuar en este asunto, por delito manifiesto contra los sentimientos religiosos, en aplicación del Código Penal.
Se han organizado concentraciones en la plaza del Ayuntamiento de Pamplona para exigirle al alcalde la clausura de esta exposición sacrílega y profana en la que se ofenden abiertamente los más profundos sentimientos religiosos católicos.
Para los católicos Dios este en esas Formas Consagradas.
Abel Azcona es un artista vulgar, perteneciente al grupo que podríamos llamar “Escoria cultural agonizante y rastrera” y ya desde ahora detestable profanador blasfemo, nacido en1988 en Pamplona para desgracia de muchos de sus muy nobles paisanos.
Con estas exposiciones se demuestra que parte de nuestra cultura y también de nuestra democracia todavía esconden el incívico insulto de artistas de mercadillo, que provienen de las cloacas putrefactas e inmundas del subsuelo intoxicado de las grandes o pequeñas urbes.
De todas formas siempre hemos de perdonar a estos artistillas chabacanos que solo buscan desde su analfabeta ignorancia: molestar, hacer daño y llamar la atención. Son unos pobres desequilibrados culturales, enrabietados porque su destreza torpe e insulsa no da para más.
Sí quisiéramos, que sea como fuere, deponga de su grotesca y malintencionada actitud por el bien de la convivencia y de la honestidad y del respeto democrático y social.
Lo que había que hacer es, menos manifestación pacífica, y entrar en esa mierda de exposición «a saco», arrasar esa mierda. Si hiciéramos como los moros, nos tendrían mas respeto. Hacernos respetar, a tiros, y a bombazos. La próxima vez, se lo pensarían dos veces. Como con Charlie Ebdo. Esos ya no vuelven a ofender a los musulmanes. Pues los cristianos, hagamos igual.