Peligros del tráfico en la ciudad.
Publicado por rafagutierrez, Posteado enOpinión
Reducir el número de atropellos en las ciudades ha de ser una de las grandes aspiraciones de los ciudadanos y especialmente de la Policía y del Área de Seguridad Ciudadana de las mismas.
Y ello ha de espolear a los responsables para poner en marcha iniciativas para reducir la siniestralidad, fundamentalmente entre los peatones y poniendo más atención en aquellos que tienen alguna discapacidad.
Un plan debería de consistir en analizar de forma concienzuda todos los pasos de peatones y especialmente aquellos más peligrosos o en los que se produzcan más atropellos, con el fin de observar si presentan deficiencias cuya corrección podría contribuir a reducir el riesgo de que un viandante sea arrollado.
- Si el punto está debidamente iluminado.
- Si la pintura en el asfalto es visible y correcta.
- Si también lo es la señal vertical.
- Si hay vehículos aparcados en las inmediaciones que dificultan la visión a los conductores.
- Si los coches alcanzan velocidades elevadas cuando llegan a él.
Puesto que la mayor parte de los atropellos se producen en los pasos de peatones, habrá que propiciar los pasos de peatones algo más elevados, que son los más seguros y los que más contribuyen a reducir la velocidad de los coches y a reducir las imprudencias y con ello la siniestralidad, sin embargo su construcción está en el aire en muchas ciudades y en muchos de los lugares que son totalmente necesarios.
La Policía Local o el Área de Seguridad de las ciudades deberían también elaborar un informe exhaustivo sobre los posibles fallos que pueden contribuir a que, en determinados lugares y no solo los pasos de peatones, los accidentes se produzcan.
Es recomendable iluminar debidamente determinadas zonas que a veces están totalmente a oscuras, e incluso cambiar bordillos, acerados o la calzada para lograr que los conductores y peatones puedan tener las debidas precauciones o para evitar peligros por deficiencias materiales.
A veces, por desgracia, para que esas modificaciones se efectúen:
- Tiene que producirse un accidente.
- O los vecinos se tienen que echar a la calle para exigirlo.
También la Policía Local, debería de acudir a distintas horas del día, a los lugares más peligrosos para colaborar, y ver in situ, el comportamiento de los conductores y de los peatones, en función de la intensidad del tráfico.
Ciertamente hay muchas ocasiones en que los atropellos no son atribuibles a causas externas, sino al despiste o la negligencia de los conductores o peatones que no respetan las normas del tráfico.
Se habla, cada vez con más frecuencia, de la necesidad urgente de implantar unas normas de tráfico para el peatón, ya que en ocasiones es, o puede ser, el infractor y el que ocasiona el accidente. Casos:
- Cruzar sin atención.
- Volverse en la vía al cruzar puede ocasionar un accidente grave.
- Si el ciudadano va corriendo puede, a veces, impedir los reflejos y la visión del conductor.
- A veces el peatón no deja suficiente tiempo para que el conductor se dé cuenta y los vea.
En todas estas medidas que hemos mencionado a lo largo de este artículo hay que poner especial atención para la seguridad de: ancianos, niños y toda persona con dificultades a la hora de caminar; pues es frecuente encontrar vehículos que no respetan a las personas que por sus dificultades tienen que ir más despacio o con más atención.
También en algunas ciudades hay suelos escurridizos que propician las caídas a personas mayores o con discapacidad principalmente en días de lluvia o cuando se circula algo más rápido.
Consideró muy oportuno que hubiera una ITV también para carreteras, calles, pasos de peatones…. Porque en muchas ocasiones los accidentes de tráfico no son causados por el mal estado de los vehículos u otras causas, sino claramente por el mal estado de las carreteras, de las calles y de las señales de tráfico. Y sí un accidente grave de tráfico es originado por el mal estado de la carretera se debían de pedir las correspondientes responsabilidades.