Palabras del Papa Francisco para las familias
Publicado por rafagutierrez, Posteado enOpinión
Permiso
- «Entrar en la vida del otro, incluso cuando es parte de nuestra vida, necesita la delicadeza de una actitud no invasiva, que renueva la confianza y el respeto. La confianza no autoriza a dar todo por supuesto”.
- “Y el amor, cuanto más íntimo y profundo es, tanto más exige el respeto de la libertad y la capacidad de esperar que el otro abra la puerta de su corazón”.
- “Podemos recordar aquí la palabra de Jesús en el libro del Apocalipsis, que hemos escuchado: <<Yo estoy junto a la puerta y llamo: si alguien oye mi voz y me abre, entraré en su casa y cenaremos juntos>> (3,20).».
Gracias
- “La gratitud, para un creyente, está en el corazón mismo de la fe:
- <<Un cristiano que no sabe agradecer es uno que ha olvidado la lengua de Dios>>. ¡Es feo esto, eh!”.
- “Recordemos la pregunta de Jesús, cuando curó a diez leprosos y sólo uno de ellos volvió para darle las gracias (cfr. Lc 17/18)”.
- “Una vez escuché a una persona anciana, muy sabia, muy buena, simple, con aquella sabiduría de la piedad, de la vida:
- <<La gratitud es una planta que crece solamente en la tierra de las almas nobles>>».
Perdón
- «Palabra difícil, cierto, sin embargo tan necesaria. Cuando falta, pequeñas grietas se ensanchan, también sin quererlo, hasta transformarse en fosos profundos”.
- “Si no somos capaces de disculparnos, quiere decir que ni siquiera somos capaces de perdonar:
- <<En la casa donde no se pide perdón comienza a faltar el aire, las aguas se vuelven estancadas>>”.
- “Tantas heridas de los afectos, tantas laceraciones en las familias comienzan con la perdida de esta palabra preciosa:
- “En la vida matrimonial se pelea tantas veces… También ¡“vuelan los platos” eh!”
- “Pero les doy un consejo:
- <<Nunca terminen la jornada sin hacer las paces>>”.
- “Escuchen bien:
- ¿han peleado marido y mujer? ¿Hijos con padres? ¿Han peleado fuerte?
- Eso no está bien. Pero no es el problema”.
- “El problema es que este sentimiento permanezca aún al día siguiente:
- <<Por eso, si han peleado, nunca terminen la jornada sin hacer las paces en familia>>”.
- “¿Y cómo debo hacer las paces?:
- <<Solamente un pequeño gesto, una cosita así>>.
- ¡Y la armonía familiar vuelve, eh!
- ¡Basta una caricia! Sin palabras”.
- “Pero nunca terminar la jornada en familia sin hacer las paces. ¿Entendido?:
- ¡No es fácil, eh! Pero se debe hacer.
- Y con esto la vida será más bella».
“Todo esto encierra una gran fuerza:
- La fuerza de custodiar la casa, también a través de miles dificultades y pruebas;
- En cambio su falta, poco a poco, abre grietas que pueden hacerla incluso derrumbar».
Por ejemplo y para terminar:
En la sociedad actual:
- «La gentileza y la capacidad de agradecer son vistas como un signo de debilidad, e incluso provocan desconfianza”.
Fuente: News.va Español