MISIÓN FLORIMÓN
Publicado por jjgarciamoros, Posteado enOpinión
Hoy, saliendo de las habituales reflexiones que suelo redactar, me voy a transportar hasta el tema del Teatro, ese arte que se escribe, se representa, se observa, se comprende, se siente, se disfruta. El teatro es un arte magnífico, pasión de muchos grandes escritores, como lo son Lope de Vega o William Shakespeare. Hoy es un día un tanto reconocido para el teatro.
Hace sesenta y tres años nace Andrés Lorenzo Pérez Araya actor y director teatral chileno, conocido principalmente por su obra La negra Ester de 1988, basada en la obra de Roberto Parra
Y cincuenta y nueve años atrás, nace María Sorté, actriz con papel en la obra teatral Amadeus.
Y si volvemos cincuenta y un años en el tiempo, nos encontramos con el nacimiento de Natasha Jane Richardson, actriz que hasta llegó a ser ganadora de un Premio Tony. En 1985 participa como actriz en el teatro de El sueño de una noche de verano, del autor anteriormente nombrado William Shakespeare.
Y hace 36 años nace la actriz Laetitia Marie Laure Casta que tendrá papel en la obra Ondine.
Así, hoy quiero introducirme en un artículo sobre teatro, un tema que, como escritor, me apasiona tanto al leerlo como al verlo representado, haciéndome sentirlo como la vida misma e introduciéndome en cada uno de los papeles de los personajes, en sus vidas, en sus circunstancias, en sus sentimientos. Y quiero referirme en este artículo a la obra MISIÓN FLORIMÓN, una delirante y cómica historia de espionaje, muy bien representada, basada en un episodio real y desconocido de la historia de España: Carlos II “El Hechizado” necesita un heredero para salvar la dinastía de los Austrias. Ha triunfado en Francia, y ahora se nos presenta en nuestro país. Los actores Vanesa Romero, Canco Rodríguez, Marcelo Casas, Jesús Cabrero y Santiago Molero representan magníficamente cada papel y momento de la obra, y harán desternillarse a cualquier espectador que esté en disposición de pasar un buen rato con una buena obra ante sus ojos, buena y cómica interactuación con el público, cercanía de los actores hacia sus espectadores y, sobre todo, muchas risas en una preciosa sala del teatro Nuevo Apolo. Sin ninguna duda, quiero recomendar esta obra que tuve la suerte de disfrutar el pasado viernes por la noche, y tras la que tuve el gusto de hablar un rato con sus actores, como he dicho anteriormente muy cercanos a su público y muy capaces de transmitir todos los sentimientos posibles a sus espectadores, siempre desde la mejor comicidad del teatro. ¡Una recomendación personal para pasar un magnífico rato!
Juanjo García Amorós
Twitter: @JGarciaAmoros
Más información en www.misionflorimon.com