Cartas al Director

Ya está claro que la OTAN, es decir, EEUU; se niega a proteger Ceuta y Melilla.

Por lo que prácticamente ya están entregadas a Marruecos, como ocurrió en su día con el Sáhara.

Y ahora teníamos la ocasión, a cambio de no vetar nosotros, la entrada en la OTAN de Finlandia y Suecia.

Pero lo ordena EEUU y nosotros, a obedecer y a callar.

Hemos perdido nuestra propia soberanía, desde hace ya mucho tiempo.

Hemos perdido más, que si nos hubieran vencido en una guerra.

Debemos lo que nunca podremos pagar y por eso Alemania nos cambió la Constitución con nocturnidad y alevosía.

Y la pregunta del millón es cómo hemos llegado hasta aquí.

Pues muy fácil, por la prevaricación de la casta política que en lugar de defender nuestros intereses, ha defendido intereses extranjeros.

Como con las inmatriculaciones, que le robaron importantes y valiosas propiedades al pueblo español, para regalárselas al Estado Vaticano paraíso fiscal.

Pues nada, si La Iglesia nombró a Franco Caudillo de España por la gracia de Dios, sin hacerle esos regalos; a esta casta política “aconfesional” debe nombrarlos al menos, Vicedioses.

¿No existe el delito de alta traición?

Pero claro, sin separación de poderes, la casta no se va a denunciar a sí misma.

¡Faltaría más!

Menuda herencia vamos a dejar a nuestros descendientes.

Rafael Bueno.

Córdoba.