La muerte en tus brazos.
Publicado por rafagutierrez, Posteado enOpinión
En una ocasión, un periodista, le pregunto, sin preámbulos, Madre Teresa:
- ¿Tiene miedo de morir?
Unía una muy especial amistad al periodista con la Madre Teresa de Calcuta. Por eso le pregunto de forma tan improvisada y sin mediar palabra: “Si tenía miedo a morir”.
La Madre Teresa aprovechó esta pregunta para explicar su parecer con respecto a la muerte.
Pero antes, ella, le dijo sonriendo:
- “Ah, veo que usted está feliz de volver a casa, con su familia”.
Y añadió Madre Teresa:
- “Bien, bien. Es lógico que usted esté contento. Va a encontrar a su mujer, a sus niños, a sus seres queridos. Va a su casa. Es justo que sea así”.
Permaneció aún unos momentos en silencio, y después, volviendo a la pregunta que le había hecho, prosiguió:
- “Yo estaría contenta como usted si pudiese decir que me muero esta noche”.
- Muriendo:
- Me iría a casa yo también.
- Iría al paraíso.
- Iría a ver a Jesús.
- “Yo he consagrado mi vida a Jesús. Convirtiéndome en monja, me he convertido en la esposa de Jesús. Todo lo que hago aquí, en la tierra, lo hago por amor a Él”.
- “Por tanto, al morir, volvería a casa. Dónde está mi esposo. Además, allí, en el paraíso, encontraría también a todos mis seres queridos. Miles de personas que han muerto entre mis brazos”.
- Son ya más de cuarenta años que dedico mi vida a los enfermos y a los moribundos.
- Yo y mis hermanas hemos recogido por las calles, sobre todo en la India, miles y miles de personas agonizantes. Las hemos llevado a nuestras casas y las hemos ayudado a morir serenas.
- Muchas de esas personas han expirado entre mis brazos, mientras yo les sonreía y acariciaba sus rostros temblorosos.
- Por eso, cuando muera, encontraré a todas estas personas. Están allí y me esperan. Nos quisimos en esos momentos difíciles. Hemos seguido queriéndonos en el recuerdo. Quién sabe qué fiesta me harán al verme.
- ¿Cómo puedo tener miedo a la muerte?
- Yo la deseo, la espero, porque me permitirá finalmente volver a casa.
La descripción de la muerte y del cielo de la Madre Teresa nos puede ayudar muy bien a meditar en esta realidad trascendente y de importantísimo valor para cada uno de nosotros.
La realidad de: los valores trascendentes, la eternidad, la infinitud de la vida y el cielo son cuestiones de las que se tiende a huir y no debería de ser así.
Es importante que la religión, que Dios y que la vida eterna ocupe un lugar preferente en nuestra existencia para que de esta manera podamos construir auténtica y dignamentemente el futuro.
Dios nos espera, busquémoslo y seremos felices transmitiendo a su vez, por este camino, la felicidad a los demás.
Fuente de la entrevista: www.zenit.org