LA COBARDÍA DE LA CARETA
Publicado por EL ZORBA, Posteado enOpinión
En mis islas, rodeado de luz, mirando los disfraces, que ocultaban su cobardía, lloré y, en silencio, perdoné.
Más tarde, en mi barrio, parte pequeña de un gran municipio, estruje mi identidad de ciudadano, grité, denuncié y exigí que mis representantes levantaran la voz y arrancaran, con la violencia legal que protege los derechos personales, las caretas cobardes contra mi fe y la de mis conciudadanos.
Las leyes están para encauzar las derivas sin sentido de grupúsculos sin moral personal pero que, alimentados por el anonimato, invaden los derechos ajenos.
Cuando la realidad social se convierte en un concierto de cascadas incontroladas de desprecio, no nos hemos de extrañar que el deseo de justicia suspire por el “dictador” que ponga a cada cual en su sitio…
No olvidemos que las dictaduras lo que tienen de malo es lo que duran, porque en definitiva, las buenas, son como los padres que dan el puñetazo en el momento oportuno para luego hacer comprender y dialogar con la disciplina del respeto mutuo.
Si los poderes políticos y sus estructuras jurídicas no son capaces de entenderlo no se extrañen que la ciudadanía queme las naves.
¡Señor, Dios de mil nombres! Perdonamos… SÍ pero también exigimos.
Las “mejillas” entienden de caridad pero no de derecho y justicia