El lamento de Dios
Publicado por rafagutierrez, Posteado enOpinión
En la primavera 2014, los parlamentarios italianos le pidieron al Papa asistir a una de sus Misas. Él, acepto y los recibió con una dura homilía que, según un analista, «tuvo el mismo tono de los Tedeum» que molestaban a los Presidentes Argentinos.
En la Misa que ofició ante cerca de 500 políticos italianos, Jorge Bergoglio habló de los «fariseos» y de una clase dirigente que ya, en tiempos de Jesús, se había «Alejado del pueblo».
En la imponente Basílica de San Pedro, lo escuchaban 9 ministros, 19 subsecretarios, 298 diputados y 176 senadores.
Hacía tiempo que los parlamentarios le solicitaban al Papa el honor de asistir a una de sus Misas. ¡Quizás alguno esté arrepentido! Francisco accedió y quiso celebrar la ceremonia en la Basílica de San Pedro y a su hora de costumbre. Sus Misas son a las 7 de la mañana, por lo que los parlamentarios tuvieron que madrugar.
Para colmo, como hemos comentado, el mensaje del Papa fue durísimo y tan directo como para que muchos se dieran por aludidos.
La lectura bíblica había sido más que significativa. Tomada del libro de Jeremías, en ella el profeta se hacía eco del: «Lamento de Dios». Lamento hacia una generación que no escuchó a sus mensajeros y que en cambio busca justificaciones a sus pecados. «Me dieron la espalda», citó el Papa, haciendo referencia a la ceguera respecto a Dios por parte de los líderes del pueblo.
«Su corazón –siguió diciendo Francisco- se había endurecido, para ellos era imposible escuchar la voz del Señor” “Somos todos pecadores, pero ellos de pecadores habían pasado a corruptos» Y advirtió: «Es difícil para los corruptos volver atrás».
Estos políticos, dijo el Papa, son personas que «Han rechazado el amor del Señor” “Son hombres de buenos modales pero de malas costumbres” “Jesús los llama: Sepulcros Blanqueados».
Massimo Cacciari, ex alcalde de Venecia, se mostró entusiasta con el mensaje. En televisión dijo que el concepto de que la corrupción es imperdonable es teológicamente discutible pero políticamente demoledor, y expresó su deseo de que el nuevo Gobierno Italiano haga los cambios que Francisco ya está llevando a cabo en la Iglesia.
No sin ironía, Vittorio Macioce escribía en Il Giornale un breve comentario que, bajo el título: “Políticos y ladrones, Dios perdona, Francisco no”. Cuando el Papa los llama “Sepulcros Blanqueados”, entienden que se las está tomando con todos y cada uno. Tremendo, muy fuerte. ¡Pánico!. Los corruptos son lo peor de lo peor.
¿Quizá somos nosotros los escribas y fariseos, piensan; y estamos mucho, mucho más lejos del perdón que las magdalenas y las prostitutas»?
Quizás también sería bueno que el papa Francisco mandara un mensaje a nuestros políticos y les manifestara también claramente, a algunos de ellos, esa incompetencia e inaceptable actitud en la que viven, que está provocando un deterioro social y económico tan grava en nuestro país.
é engraçado