Día Mundial del Libro. 23 de abril.
Publicado por rafagutierrez, Posteado enOpinión
La UNESCO estableció en 1995 que cada 23 de abril el mundo celebraría el Día Mundial del libro, como:
- Recuerdo de la fecha en que, en 1616, fallecieron:
- Cervantes, Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega.
La efeméride tenía ya una tradición establecida en España y en otros países y sigue siendo motivo de eventos y actividades de todo tipo, que crean una auténtica fiesta de la literatura.
Tú también puedes aprovechar la fecha para homenajear ese maravilloso mundo que se esconde, en muchas ocasiones, tras las páginas de un libro.
Ciertamente en la mayoría de los casos es así, pero en otras ocasiones no lo es, y no podemos ser ingenuos. Por lo tanto siempre conviene comprobar y asesorarnos de lo que leemos, y de lo que leen nuestros hijos:
- Para no caer nosotros, y que no caigan ellos, en la trampa de una lectura:
- Estúpida o inútil o venenosa o dañina.
Lógicamente existen infinidad de libros buenos y muy buenos, pero un oportuno consejo siempre es conveniente y muy útil para, por lo menos, no perder el tiempo y no gastar el dinero inútilmente.
Además en el mundo ciertamente hay infinidad de ideas e infinidad de pensamientos; pero no con todas esas ideas y con todos esos pensamientos comulgamos; y por lo tanto conviene seleccionar.
Lo que a otros no perjudica nos puede perjudicar a nosotros.
Como profesor he podido constatar cómo, a veces incluso:
- Los libros de texto: Tergiversan la verdad, o la omiten, o crean confusión en conceptos o ideas esenciales de la vida.
Respecto a todo esto nos viene bien ese punto 339 de Camino que, en los años 30 del siglo XX, escribió San Josemaría:
- “Libros: no los compres sin aconsejarte de personas cristianas, doctas y discretas. Podrías comprar una cosa inútil o perjudicial. ¡Cuántas veces creen llevar debajo del brazo un libro… y llevan una carga de basura!”
En este día del libro no me quiero quedar con los tintes negativos; aunque ocultar la realidad tampoco es objetivo; pero una vez mencionada os animo: a la lectura habitual, a paladear la realidad escrita, a saborear la belleza poética de las palabras, a disfrutar de una anécdota leída detenidamente.
- A leer esos cuentos de siempre llenos de magia y de ternura.
- A disfrutar de esa novela que nos atrapa y nos deslumbra.
- A descubrir la maravilla de esa lectura apasionante que contiene:
- Ideas, pensamientos, genialidades, conocimientos, inventos; y todo de una manera atractiva y singular.
Y, para terminar, os ánimo a que aprendamos a descubrir la conexión entre el libro y la sabiduría, entre el libro y el entendimiento, entre el libro: la verdad y la vida.
Y que un día, no muy lejano, seáis vosotros capaces de escribir ese libro que hoy: os maravilla, os cautiva y os estremece.