DEMOCRACIA POR SORTEO
Publicado por Gerardo Hdez Zorroza, Posteado enOpinión
Ayer mismo escuché una conferencia de Etienne Chouard donde comentaba que las actuales «democracias» están podridas desde la base, son auténticas falacias. Todas se basan en Constituciones formuladas por los poderosos, al servicio de sus intereses, que han sido utilizadas para tirar por tierra además –y esto no lo dice él– toda la organización que había en las comunidades rurales, nuestros pueblos, donde el reparto de funciones y tareas se realizaba con el compromiso de todos, que se implicaban con lo que consideraban común, y que entendían era su responsabilidad que no podían delegar.
El Comunal (que aún existe en algunos pocos reductos rurales), el Concejo abierto, los trabajos como el desbrozado y la limpieza de caminos comunales y montes, las llamadas «hacenderas», han desaparecido hoy –salvo en esos escasos reductos–, delegando estas tareas en el Ayuntamiento, la Diputación, el Estado, «Europa» y su desmesurada organización burocrática. Esa superestructura organizativa, plagada de normativas y leyes, de incentivos y subvenciones no sirve a las necesidades de la tierra y de la gente consciente que la trabaja, sino que incita especialmente a la dejación de responsabilidades y, muchas veces, a querer vivir de las subvenciones. Unas subvenciones, mayormente, al servicio de los intereses de la Gran Industria Agro-alimentaria y su «explotación» de los recursos naturales.
Volviendo al principio, Etienne, basándose en que los más honrados y actos no quieren participar en los Gobiernos actuales, en que éstos, por contra, están en manos de la gente con menos ecrúpulos, propone recuperar el ejemplo de democracia que vivió Grecia durante doscientos años (del 500 al 300 antes de Cristo), donde los cargos electos se desempeñaban por sorteo entre sus ciudadanos, por periodos cortos y nunca repetibles.
No comparto con Etienne su falta de confianza en el ser humano y su enfoque exclusivo en las estructuras.
El auténtico cambio, si pretende perdurar en el tiempo, necesita del cambio de las conciencias. El conferenciante señala solo una vía para recuperar el poder del pueblo que las Constituciones otorgan a los poderosos.
Despertar individual y nueva organización democrática, pueden ser compatibles en este momento histórico de cambio de paradigmas.
Hasta que no seamos todos seres «despiertos», necesitaremos un mínimo de estructura para gobernarnos, que pretenda ser justa y verdadera y no esté sometida, como sucede ahora, por mentirosos profesionales; que choque lo menos posible con el sentido común general.
Un sentido común que está mucho más próximo a la gente sencilla que a las castas dirigentes que nos gobiernan, bajo el “amparo” de Constituciones amañadas desde la base.