CRISTIANOS, SIRIA. JUEGOS OLÍMPICOS 2012, LONDRES. LIN DAN, CHINA.
Publicado por Carmen Amigo, Posteado enDeporte, Opinión
A gritos de los Imanes “Los Cristianos deben abandonar Quasayr” y al ultimátum del viernes 10 de agosto 2012. Los cristianos sirios encuentran la muerte en esta persecución.
Hecho repetido en diferentes lugares del globo. Ya sucedió con la muerte de las Religiosas Agustinas en Argel. Antes murieron otros Misioneros en el Sur.
De repaso; el encuentro con nombres de desaparecidos por el hecho de ser cristianos-católicos. Y la maldad de los dirigentes.
Aun los países de más creyente arraigo como España, han sentido el rechazo. Por parte de miembros del Gobierno del ex Presidente Zapatero. Mientras se imponen nuevas tendencias por arreglos regionales.
Es descorazonador, cuanto está sufriendo la Sociedad, por el hecho de ser Cristiano. Católico.
La persecución está alimentada por la dejación y permisividad de ciertos Gobiernos. Nacionales. Regionales. Europeos. Que con hablar de la alianza de civilizaciones han conseguido a mayorías, camufladas en minoría, se hagan con la Universalidad.
Acomplejada. Transigente. Con miedo a llamar a cada uno por su nombre. A obviar que el maltrato, la persecución, la amenaza; tiene un nombre. En no importa el lugar del Mundo. Europa. Asia. América. En cualquiera de sus puntos cardinales.
La Sociedad emula al avestruz y pasa.
China. LIN DAN.
Lin Dan medalla de Oro en el torneo de bádminton 2012. En Londres.
Por orden del Organizador de los Juegos Olímpicos (COI) “Se prohíbe llevar cualquier signo religioso”.
Ante tan desproporcionada orden al creyente se le representa eso ¡Represión!
El brazo de Lin Dan una y otra vez muestra la cruz tatuada en el alto.
¡Coraje! Valentía.
Y el telespectador dice ¡Gracias! A su desobediencia.
Vemos. Al fornido y fatigado corredor que descansa en pista del esfuerzo de la carrera y estruja entre sus manos y alza; una Biblia.
Y las cruces se repiten. Al cuello y en tatuaje.
La atleta que se persigna.
Besa medalla.
Europa permite cabezas cubiertas en pista y calurosas ropas que colocan a la mujer en difícil plano.
Europa.
Inglaterra. De Iglesia Cristiana. Impide lo digno al Atleta. Sumándose a la marabunta. Mientras pueblos enteros lloran. Y horrorizados escapan de la persecución y sangre.
Carmen Amigó y Pérez-Mongay