CASTILLO PALOMAR. ZARAGOZA (ESPAÑA)
Publicado por Carmen Amigo, Posteado enOpinión
(Del Libro «Sol y Niebla. Epistolario»)
Los terrenos ahora nada tienen en parecido a como se encontraban en el S. XIX.
En el año 1881 una Familia llamada Palomar hace construir una edificación con gran parecido a Castillo.
La Finca tenía como mil hectáreas y si hoy tuviésemos que situar en que parte de la Ciudad están estos terrenos diríamos que en Barrios Bombarda y Las Delicias. Muy próximos a la Estación actual del Ferrocarril.
¡Lo que fue… Fue!
El edificio fue derruido a finales de los años sesenta y construido un Parque Público.
Un Parque que no siempre cuidan sus visitantes y que han tenido las Asociaciones de Vecinos que llamar la atención al Ayuntamiento de Zaragoza para una limpieza continuada. Porque ciertos colectivos nada deseables tiraban instrumental de sus cuitas.
Próximo. Pero aislado. Este Parque da lugar a que ciertos mal carados hagan sus sinvergonzonerías.
El tema principal por el que he venido a recordar el Castillo Palomar es por la triste necrológica. Los años veinte y mucho. Treinta y más… Del mil novecientos.
En aquellos años; se hacía medio eco sobre papel, de las muertes de jóvenes que se quitaban la vida.
Al primero le llamaré Ramón.
Un joven soldado de tímido comportamiento destinado en acuartelamiento próximo al Castillo Palomar al que gastaron lo que actualmente llamamos una prueba de estudiante haciendo circular que había cogido un reloj cuando la realidad era que estaba a buen recaudo en la maleta de su dueño.
Viéndose acorralado por todos los compañeros (así lo pensaba Ramón) decidió quitarse la vida y en Castillo Palomar lo que sobraba eran árboles.
Obvio decir que la Familia quedó destrozada y quien dio motivo de ignominia salió airoso.
Uno de sus primos hermanos solía tener cierto amor a dicho espacio (no confesó a nadie el por qué) se llamaba José.
José perdió además de Ramón a Lorenzo. Dos primos hermanos por parte de Madre.
Lorenzo. La noticia de su extraña muerte (no tenía agobio alguno y era soltero) la emparentaron con la de una joven que dos calles atrás se suicidó.
¡Males de Amor!
El mal de amor no era tal. Resultó ser asesinato.
En la tienda donde trabajaba muy cerca del Mercado Central de Zaragoza era muy querido por el dueño que tenía dos hijos y sin parecer… Resultó que les molestó conocer que su Padre consideraba a Lorenzo como uno más de los suyos y que lo había incluido en Herencia.
El hermano de Lorenzo (un Concejal del Consistorio Zaragozano) hizo todo para que no saliera el nombre de su hermano en prensa.
Y cerró caso. No hubo las necesarias averiguaciones.
Los años traen nuevas generaciones y quieren saber el por qué de la crueldad de algunos hombres.
Solo los de mayor edad siguen diciendo…
¡Deja…. Deja…!
¡Eso pertenece al pasado!
¡Tú Reza!
Ramón y Lorenzo dos jóvenes de rostro agraciado. Dos estrellas.
Que siguen visitando a quienes les recuerdan.
Carmen Amigó y Pérez-Mongay