El pasado mes de julio, mi familia y yo viajamos a Benicarló. Alquilamos un apartamento a través de internet. La situación era estupenda, en la Avenida Papa Luna, 85, (que es la avenida que une Peñíscola con Benicarló).  En las fotos de la página web se veía perfectamente: casitas bajas delante del mar. ¡era perfecto!

Pero cuando fuimos a recoger las llaves a la oficina de Apartamentos Benicarló Playa 3000, nos dicen que hay un error en nuestro bono de reserva y nos mandan a un bloque de pisos a 25 minutos de la playa.  Las habitaciones daban a un patio de luces muy estrecho, y ¡no había cortinas en las ventanas!, tampoco había mesillas, ni microondas y teníamos un mini sofá que usábamos por turnos . La verdad es que el apartamento era nuevo ,pero estaba a medias de amueblar y ademas la ubicación dejaba mucho que desear. Simplemente, no era el que habíamos alquilado.

Pero lo peor de todo fué ,que después de perder casi tres  horas, y hablar dos veces por teléfono con Destinia, (que era con quien habíamos contratado nuestras vacaciones), nos dicen que había sido un error en la dirección, que podíamos poner una reclamación, y que nos iban a devolver 27 euros.

A L U C I N A N T E !!!