Reflexiones de un adulto indocumentado

Hoy he vuelto a reflexionar y a preguntarme mil cosas como hago a diario; y también he vuelto a plasmarlas en estás hojas que acompañan mi día a día y que espero que sirvan para algo y sobre todo para alguien, alguien que está ahí y que busca respuestas sin ni siquiera habérselo planteado . 

Hoy pensaba en los niños, esos niños que, la mayoría obligados por sus padres, van cada día con su mascarilla confirmando el ritual que el Gobierno nos ha dicho que puede ser nuestra salvación. Pobres niños, pobres padres. No saben que a  esas edades se está formando la personalidad del Ser y no saben que el Ser no acabará de formarse pues no consigue verse tal y como realmente es sino oculto tras una máscara. Eso sí, caldo de cultivo para nuestros psicólogos y psiquiatras que están frotándose las manos pensando en todo el trabajo que en breve van a tener. De hecho, que ya tienen. Una de mis grandes amigas, psicóloga, está tratando a  niños y adolescentes ya que la consulta se le ha llenado en los últimos meses y no para de recibir llamadas.

Los niños y los padres no saben qué hacer pero siguen aceptando todo lo que el Gobierno les plantea y los directores de centros escolares siguen exigiendo mascarilla para que los niños y no tan niños puedan asistir a clase.

Reflexiones de un adulto indocumentado

Hoy hace un día precioso; como otro día más de esos días de  enero fríos pero con solecito. 

Siguiendo mi ritual diario abrí el grifo de la ducha mientras escuchaba la playlist del 79 y el agua caliente comenzó a correr sobre mi cabeza. Son esos momentos de la mañana en los que me vienen los pensamientos lúcidos y hoy como algún otro día, no es diario, me llegó un pensamiento sobre la situación actual que estamos viviendo.

Me parece sorprendente que la gran mayoría de mis amigos, aquellos que ya superan los 55 años, estén viviendo esta situación sin ni siquiera cuestionarse lo que nos están contando en los medios de comunicación y eso ha hecho que yo me plantee la siguiente pregunta: “ ¿ Si hubiéramos vivido en otro momento de la historia y Hitler o Stalin nos hubieran obligado a encerrarnos en casa, lo habríamos hecho sin mas? O, ¿acaso habríamos dudado y cuestionado lo que nos estaban contando?. 

Pues esa es, desde mi punto de vista, la situación actual en la que parece que muchos de nosotros estamos dormidos sin cuestionarnos absolutamente nada y lo que aún me sorprende mas es como tienen completamente dominada a la juventud que no se cuestiona absolutamente nada de lo que les llega a través de redes sociales, youtube, twitter, etc…

Pero si os fijáis tampoco los mas adultos ya que estamos todos metidos en la rueda de este sistema que gira sin parar y nos hace no tener tiempo ni para pensar que todo puede ser una gran mentira; y si en algún momento lo dudamos, preferimos quitarnos el pensamiento para seguir dentro de la rueda girando sin parar hasta que nos dejen.

Pues bien, vuelvo al planteamiento inicial; si Franco nos hubiera dicho que por el bien del Estado había que aislar a nuestros mayores y darles de beber agua helada ¿qué habríamos hecho?

Pues bien, estamos viviendo una situación similar y parece que estamos todos cegados por la supuesta “ Democracia” en la que dicen los de arriba que vivimos.

¿Os habéis cuestionado que todo lo que nos están contando puede ser falso? No digo que lo sea pero simplemente, ¿os lo habéis cuestionado? Ninguno de nosotros lo vivimos pero hay un ejemplo que creo muchos recordaréis de un personaje de la historia reciente que llegó a convencer a todo un país de que les estaban invadiendo los extraterrestres.  Sí, Orson Wells lo hizo en 1938 y sólo a través de la radio. ¿Os imagináis que es lo que pueden hacer ahora con nosotros los amos de los medios de comunicación? Lo curioso es que no queremos, ni tenemos tiempo de planteárnoslo. También es curioso que en 1949, a través de Radio Quito en Ecuador se volvió a realizar el experimento y volvió a dar el mismo resultado: “la ciudadanía quiteña se había concentrado en las calles de la ciudad, en masivos éxodos hacia las montañas, huyendo todos desesperados para salvar sus vidas, porque pensaban que esto era real. Asimismo, muchas personas también se congregaron en largas filas de los confesionarios de las iglesias, creyendo ingenuamente que el fin de la Tierra estaba cerca”.

Así que yo me pregunto ¿cómo puede ser posible que hoy en pleno siglo XXI personas super formadas -como dicen ellos, la generación mejor preparada de la historia – no sean capaces de cuestionarse lo que está pasando con esta “Pandemia”?.

¿Cómo  es que no pedimos se conforme un grupo de expertos constituido por científicos  de diferentes especialidades y con criterios diferentes que trabajen en favor de una solución global? Nos dijeron que había un grupo de expertos y después lo desmintieron, eso fue una auténtica mentira y nadie ha dimitido por ello. Seguimos aceptando lo que nos cuentan sin cuestionarlo lo mas mínimamente.

Otra pregunta que me hago y a la que no encuentro respuesta: ¿ Cómo es que los médicos y personal sanitario que están en las zonas de Covid de hospitales, no exigen colocar cámaras para que la población pueda ver su trabajo diario y valorarlo en función a lo que realmente hacen y no a lo que los medios de comunicación nos cuentan?

Y sigo con las preguntas, ¿ puede alguien explicarnos, por favor, por qué no se autopsias a los fallecidos por Covid? Tengo entendido que normalmente se hacen para saber las causas del fallecimiento pero en este caso desde Marzo 2020 se suspendieron las autopsias; ¿cuales son las razones?; no sirven las autopsias para conocer mejor el virus? Y más si como dicen ahora está mutando, ¿no?. Eso también nos ayudaría a saber quien ha fallecido “de Covid” o “con Covid” y a determinar qué otras patologías son las que determinan qué personas proteger de manera especial.

Por otro lado, ¿cómo puede ser que en un Estado libre, el Gobierno  ayudado por los dueños de las redes sociales, censurara sin mas las opiniones de personas que simplemente piensan distinto?. ¿Recordáis  cuando  en época de Franco se hacía eso?  Parece que se os ha olvidado. Yo recuerdo perfectamente cuando ciertos libros tenían que venir de Argentina o de Francia pues aquí estaban prohibidos; recuerdo cuando censuraban revistas por llevar algún artículo que criticaba al régimen o bien por tener alguna viñeta que no les pareciera bien a los censores pero parece que eso se os ha olvidado y ahora aceptáis cualquier cosa que el Gobierno “Democrático” haga con nosotros.

Simplemente os pido recuperar el espíritu crítico que tuvimos la suerte de poder hacer crecer en nosotros y aplicarlo en este momento pues de lo que hagamos ahora dependerá el futuro de nuestros hijos.