Fue un Presidente con pocos deseos de alcanzar lo mejor para España.
Un Presidente…Al opuesto. Sin deseo de conservar para España; su hegemonía.
¡Cambiante! Oblicuo.
De y en…Mirar por España.
De…Enaltecer a España.
En…Reconocer lo que la Nación Española representa.
Y…De nulo apoyo a representarla en marco exterior.
Con historial deplorable. Paro. Dispendio.
Para recuerdo…
Un antes de su Presidencia. Cuando dispusiera: Mantenerse sentado al paso de la Bandera Estadounidense el 12 de octubre de 2003 Día de la Hispanidad. Siendo líder de la oposición. PSOE. Por su “NO A LA GUERRA DE IRAK” en la intervención de EE.UU.

Era Alcalde en Zaragoza D. José Atarés.
ACTO: PREMIOS NACIONALES DE DISEÑO 2002 organizados por el Ministerio de Ciencia y Tecnología y la Fundación BCD. Con entrega el 7 de abril de 2003 en el Auditorio de Zaragoza.
El madrileño afincado en Huesca Isidro Ferrer era uno de los galardonados así la empresa catalana; Corporación Empresarial Roca.
Los incondicionales habían introducido en maleta de “mariscal” su “NO A LA GUERRA”, pedazos de tela blanca en tendedor.
De vergüenza Nacional el comportamiento del distinguido con el premio.
En el Acto: Su Majestad.
Tomado el premio (que no rechazó Ferrer) su posicionamiento a favor del “NO” que sus compañeros exhibían lo demostró cuando interrumpió el “Momento” con una perorata que no venía al caso.
¡Sí! A su caso.
Cierto; que estaba bien calculada la interrupción. Eso no lo improvisan, sino que los propios en dirección del Auditorio debían de estar conchabados teniendo a bien colaborar. Al cortar el apoyo del micrófono; a Don Juan Carlos.
Un encogimiento de hombros por parte del Rey, y desconcierto entre los que esperaban las palabras finales. Los barulleros se estaban saltando el protocolo.
En esas; el Señor Ferrer a la faena.
En el Ayuntamiento de Zaragoza el PP. Que no debió pedir explicaciones a los intrigantes en número superior, y de raíz diferente. Con el cesto siempre al acecho.
Tampoco debieron preguntarse los ediles ¿Cómo ha entrado la carteleria en trapo?
Un portafolio de invitado hizo la faena. A decir de un corre ve y dile: A él; no le miran.
¿Qué es un Auditorio?
Lugar de Cultura con mayúscula.
Y el Señor Ferrer acostumbrado en tiempos al Arte de Talía, quiso fuese su parodia.

Tal discípulo no pudo beber de mejor líder.
¡Ah! No perdonaron la bebida y algunas señoras en sus bolsos escondieron las pequeñas porcelanas blancas de diseño en que sirvieron ágape.

El 12 de octubre del 2004 Estados Unidos no es invitado a participar en el Desfile del Día de la Hispanidad. Era Presidente Rodríguez Zapatero.

La consideración a nuestra Bandera en puntos de los Estados Unidos como Luisiana. Alabama. Debería llevar a reflexión.
Luisiana. Estado que se sitúa al Sur del País sobre el delta del Rio Misisipi.
Sus fronteras Oeste con Texas, Norte con Arkansas, Este con Misisipi y Sur con el Golfo de México.
Luisiana fue dos veces Española y no duda en poner en mástil la Bandera de España junto a la suya.
Por el Misisipi ondea el Pendón de Castilla en el “CREOLE QUEEN. Puerto de nuevo Orleans”.
Y en el NATCHEZ, junto a la Bandera Americana ondea la Bandera Española.

Alabama recibe su nombre del rio Alabama que significa en lengua de los indios Chotaw “limpiador de la espesura”. Se sitúa al Sur de los Estados Unidos su capital Montgomery. Limita con Tennessee al norte, Georgia al este, Golfo de Méjico y Florida al sur y con el Estado de Misisipi al oeste.
Alabama no oculta su vinculación con España al conservar cuanto hace alusión a ella. Las estatuas de Isabel la Católica y la de Fernando de Aragón.
Su Plaza de España.
Diez banderas españolas ondean.
Los conservados bancos de cerámica de Talavera con leyendas y dibujos alusivos a España.
Y el Escudo de España.
Sin agravios. Con respeto. Estados Unidos por su Historia habla.

Solo dos pinceladas.
Luz obligada en decir a su obscuridad Señor Rodríguez Zapatero: Que buen Presidente pudo tener España si la hubiera respetado. Que mal Presidente fuera quien la destrozo; a sabiendas de que la Historia ni se vende ni se arrienda.

Carmen Amigó y Pérez-Mongay