Cartas al Director

En la clase política, según nos estamos dando cuenta por su evidencia, hay todo tipo de personajes:

• Unos ciertamente buscan nuestro bienestar y quieren trabajar para conseguirlo.
• Otros quizás también lo quieran; pero no saben; ni pueden, porque les falta:
  • Experiencia, profesionalidad y conocimientos.
• Y otros solamente buscan nuestro voto para cumplir con ello sus objetivos, que en muchas ocasiones son totalmente contrarios a nuestros intereses y a los de España.

Hay quien quiere convertir el Congreso en un circo y poner allí en escena sus payasadas, enmascarando así la triste y cotidiana realidad, mientras los ciudadanos sufrimos las consecuencias de una España en continua clave de crisis.

Por lo tanto a la hora de votar habrá que tener en cuenta diversas cuestiones:

• Tener en cuenta la coherencia del programa, su veracidad y su viabilidad.

Gran parte de lo que se nos dice por escrito y verbalmente, e incluso impetuosamente y con euforia desmedida, es pura mentira: engaño global y premeditado.

• Tener cuidado con fraudes encubiertos, puestos como trampa y que enturbian la veracidad de los programas.
• Comprobar, en cada caso,  la gravedad de la corrupción: inmoral y antisocial, que esconden los Partidos y las personas que lo componen.
• Tener cuidado y estar advertidos del engaño de los políticos vendedores de humo. Venden mentira tras mentira.
• Cuidado con la diversidad de las estrategias fraudulentas de los partidos para vendernos su voto.
• Cuidado con el desorden ocasionado por el afán desmesurado y desleal de poder. En muchos casos sólo le interesa nuestro voto:
  • Para ellos vivir acomodadamente y, si ello es necesario, arruinando nuestras vidas.
• Cuidado con los incomprensibles tejemanejes de los pactos, en busca de un poder a toda costa, y a cualquier precio, y de espaldas al ciudadano y su bienestar.
• Cuidado con los programas dictatoriales que ya ocupan escaños en nuestro Parlamento, y que intentan transformar nuestra democracia española en dictadura tercermundista y aniquiladora.
• Cuidado con los políticos:
  • Bolivarianos, Chavistas y Comunistas.

Líderes envenenados, tóxicos. Son la escoria de la democracia. Basura política. Horror, miseria y muerte.

• Cuidado con los extremismos políticos y con los radicalismos antisistema.
  • Son: antidemocráticos, antipolíticos y antisociales.
• Cuidado con las políticas que ya están avalando, enmascaradamente e incluso abiertamente, en el Parlamento y en los Ayuntamientos, la violencia y el terrorismo.
• Cuidado con: las astucias, las máscaras y los disfraces de los políticos.
• Cuidado con aquellos Partidos que, de una forma imperceptible o no, ahogan nuestra libertad o la recortan, y nos prohíben las prácticas: de nuestros ideales, o de nuestras creencias.
• Los intereses partidistas y personales de los políticos en muchas ocasiones son más fuertes que la búsqueda de bienestar de todos los ciudadanos. Comprobar, antes de realizarlo, la utilidad del voto, verificando y comprobando realidades.
• Cuidemos nuestro voto; de él depende: el futuro de la democracia, la paz y el progreso.