Al fin, la Iglesia se mueve.
Publicado por lisardocifu, Posteado enOpinión
Además de la escalofriante cifra de casi 5 millones de parados hay otras no menos terribles que han saltado a la prensa estos últimos días: el 22% de los españoles están a punto de sobrepasar el umbral de la pobreza mientras que el 4% está ya en situación de privación material severa. España, junto a Bulgaria y Rumanía ocupa uno de los primeros puestos de esta terrible lista
Mientras tanto, la Iglesia Católica, no está sufriendo los efectos de la crisis. Sus miembros, especialmente su jerarquía, viven en otra galaxia ajenos al terrible problema humano que está sufriendo este país. Claro, ellos no han perdido ni uno solo de sus privilegios y no ha sufrido el más mínimo recorte en el dinero que les pagamos entre todos.
A cambio su dedicación única es la de siempre: acumular poder, propiedades e influencia sobre los gobiernos a los que respaldan y en los que se apoyan. Magnífico triunfo el haber conseguido suprimir ¡al fin! una asignatura que podría convertir en ciudadanos (terrible palabra) a los que solo deben ser súbditos.
Pero al menos en los últimos días hemos visto como la Iglesia de Roma, por fin, se ha movido en auxilio de la gente que sufre. El Jefe del Estado Vaticano, es decir, el Papa, se ha puesto en marcha: estremecido, sin duda, por la trágica situación de su rebaño que, incluso, ya ha llevado a varios de sus miembros al suicidio, ha dedicado muchas horas de arduo trabajo tratando de encontrar la forma de paliar los efectos de este trágico (y provocado) tsunami social.
Finalmente, el Santo Padre, en un supremo y agotador esfuerzo (que no excluye la Inspiración Divina), ha encontrado la forma de aliviar el sufrimiento de las gentes. Y así ha declarado triunfal y solemnemente, urbi et orbi, que los Reyes Magos eran de Huelva.
J.Nieto