Cartas al Director

ABSOLUTO   ABSOLUTISMO .  Las mayorías absolutas en cualquier parlamento que se precie de “democrático” no pueden valer para todo, y todos  aquellos partidos que tengan esa mayoría no pueden legislar a su  libre  “antojo”, y copar el control de  de las cámaras para hacer todas las reformas legislativas que les vengan en gana como si de un poder “absoluto” se tratara y solo buscando sus propios intereses y beneficios. El voto que los ciudadanos emitimos, ya sea en elecciones (autonomicas, generales o municipales) no les otorga esa potestad . Las ultimas leyes o iniciativas impulsadas por el partido que sustenta  el gobierno del estado, son buena prueba de ello. Aprobar a prisa y corriendo (en pleno mes de agosto) unos presupuestos generales para el próximo año, el quinto presupuesto que tendrá el estado ¿en cuatro años? Que es lo que dura una legislatura, dejando asi al próximo  parlamento que surja de las urnas en unas elecciones que ya se nos anuncian para el próximo mes de diciembre (en plenas navidades), ojo al dato completamente  atado de “pies y manos” para poder ejercer precisamente esa función para lo que se le ha elegido. Tratar de aprobar leyes, como la que pretende reformar el tribunal Constitucional  ( una reforma express) sin ningún  acuerdo ni consenso con el resto de grupos parlamentarios. Parecen ignorar que en cualquier el juego parlamentario (sano se entiende)los acuerdos electorales y pos electorales  son siempre deseables  para conformar esas mayorías parlamentarias, para evitar precisamente lo que parece que se haya convertido en definitiva en un gobierno por decreto.