Ya estoy cansado de escuchar que si Juanma Moreno ha ganado las elecciones andaluzas, que si ha hecho una campaña así o asado, las virtudes que tiene o deja de tener, etc.

O cualquier otro político en otras elecciones.

¡Todo mentira!

En un sistema partitocrático como el que padecemos, los ciudadanos votan listas de partidos cerradas y bloqueadas, hechas por los partidos políticos de espaldas al pueblo.

Por lo tanto ganan o pierden listas de partidos y nunca personas.

Si los partidos eligieran de cabezas de esas listas a las diferentes cabras de la Legión, éstas saldrían igualmente, como salen los políticos.

¿Diríamos también que si la cabra hizo una buena campaña o no, que si tiene carisma, etc.?

¡Hombre, por favor!

Otra cosa sería que tuviéramos una democracia con la debida separación de poderes, donde el ciudadano sí que elige directamente a su representante, al que también puede destituir.

Pero mientras no se cambie el sistema, esto es lo que tenemos.

¡Ya está bien de tonterías!

Rafael Bueno.

Córdoba.

Esto es lo que ha pasado en las últimas votaciones andaluzas.

No es que la derecha haya ganado, no; sino que la izquierda se ha suicidado al traicionar sus más elementales principios.

La izquierda, como la Iglesia, han hecho lo contrario de lo que predican y claro, recogieron lo que sembraron.

Me refiero por supuesto a ambas jerarquías y no a sus bases, que son los primeros y más engañados.

¡Se puede engañar a algunos todo el tiempo, o a todos durante cierto tiempo; pero no se puede engañar a todos, todo el tiempo!

Rafael Bueno.

Córdoba.

En la cordobesa procesión del Corpus Christi, la dorada y lujosa custodia de Arfe, sufrió una avería, quedándose totalmente inmóvil en el patio de los naranjos de la Mezquita.

El Obispo Demetrio se vio obligado a portar al Santísimo, teniendo que abandonar inmediatamente, al sentirse muy indispuesto.

¡Castigo de Dios!

No me cabe la menor duda.

Rafael Bueno.

Córdoba.